viernes, 30 de julio de 2010

Conserva de Ají Picante


Propiedades del ají:




La pimienta que nos proporciona el picante es una fuente  abundante en vitaminas B y vitamina B6 principalmente. También en minerales como potasio, magnesio y hierro.
Hay distintas variedades de ají picante, el Chile es fuerte pero el de Cayena es el mas picante.
El aceite de la capsacina es el que produce la sensación picante, no se diluye con agua, se debe comer un pedazo de pan para aliviarse. 
Sirve para resaltar el gusto en comidas como tallarines hervidos y salteados en una sartén con ajo, aceite de oliva y un ají picante, queda bien con papas, sopas y estofados. 
Previene la formación de coágulos en la sangre, activa la salivación y por ser ricos en vitamina C y Beta-caroteno combate el envejecimiento prematuro.
Reducen los niveles de colesterol, combate la arterosclerosis, contribuye a regular la presión sanguínea, estimula la circulación, mejora el rendimiento cardíaco y aumenta la vida celular de la piel y el cerebro.


AJÍES PICANTES
CONSERVADOS EN ACEITE
Preparación:
Corte los ajíes en rodajitas.


Acomódelos en un frasco cubriéndolos con aceite e intercalando los pedacitos de ajo y las hojas de albahaca.
Se conservan varios meses.









Los pimientos son originarios de Sudamérica. Perú es un país privilegiado en cuanto a la variedad y calidad de sus ajíes, por ejemplo los rocotos (Capsicum Pubescens) se cultivan en Perú y en Bolivia desde hace cientos de años. Son de piel bien gruesa, jugosos y sumamente picantes. 


Otra variedad muy llamativa es el ají Brasil Estrella de Mar (brazilian starfish), yo lo conocí con el nombre de ají marcianito.
Es una variedad inusual por su forma estrellada.


Sus flores blancas también muy atractivas, sus pétalos en el interior tienen una coloración amarillo-verdoso.




 

miércoles, 28 de julio de 2010

Budin integral con chocolate y semillas de amaranto

                             
                          
          
El árbol del cacao tiene entre 10 y 15 frutos, pero en algunas ocasiones puede llegar a tener hasta 20.
Hay dos tipos de cacao: uno es rojo y al madurar se convierte en morado y el otro es verde y cuando madura se vuelve amarillo.


En su interior, rodeados de una pulpa dulzona y blancuzca, se alinean entre 25 y 30 granos rojizos. Éstas son las semillas que darán origen al chocolate, pero que probadas en bruto serían rechazadas por cualquiera ya que su sabor es intensamente amargo.
Cuando el cacao está maduro se corta del árbol y se deja a la sombra sobre hojas de plátano entre 3 y 6 días, para que fermente. Luego se expone al sol durante el mismo período para que se seque. 


Cuando los granos ya están secos se tuestan en un horno y después se les quita la cáscara para triturarlos. Por último para preparar el chocolate se añade azúcar y leche.
La calidad de un chocolate está determinada por el origen y porcentaje de componentes del cacao, el resto de ingredientes y por su proceso de elaboración. Los chocolates que se elaboran con cacao de Ecuador, Venezuela, Ghana y Costa Rica son de buen sabor y gusto fino, los de Indonesia poseen un sabor suave, los de Brasil aportan un sabor y aroma muy variables.
Dado su alto contenido de grasa conviene consumirlo en cantidades reducidas.

Receta:
150 gr de harina integral fina tamizada
100 gr de azúcar orgánica
3 huevos
60 cc de aceite de girasol
30 gr de chocolate picado
1 cucharada de polvo de hornear
20 gr de cacao sin azúcar en polvo


Preparación:
Se mezcla el azúcar con los huevos. Se agrega el aceite y luego la harina tamizada, con el polvo de hornear, el cacao y el chocolate picado grueso. Se vierte la preparación en una budinera y antes de colocarla en el horno se esparcen las semillas de amaranto.



Se cocina en el horno a una temperatura de 180 grados durante 30 minutos o hasta que al introducir un cuchillo en el centro salga totalmente limpio y seco.




Amaranto:

Es un vegetal con un muy alto valor nutritivo por su alto contenido de proteínas, aminoácidos y minerales. Tiene el doble de proteína que el maíz y el arroz.
Esta hermosa planta puede alcanzar más de metro y medio de altura. Según las variedades puede presentar diferentes tonalidades que van desde rojos intensos, verdes o dorados.



Por siglos formó parte de la dieta de los indígenas americanos. Pero con la llegada de los españoles, fue considerada un cultivo pagano, se prohibió su consumo y toda plantación se quemó. Sólo permaneció como cultivo de sobrevivencia en Bolivia y México, donde  la llamaron la "semilla de la alegría".



La semilla de amaranto se puede utilizar en muchas preparaciones, panes, galletas y barritas son las más comunes.
Tostar semillas de amaranto es muy divertido porque además de saltar se transforman en unas blancas, simpáticas y muy pequeñitas palomitas de maíz. Para hacerlas solo necesitará una cacerola con tapa.



















domingo, 25 de julio de 2010

Pan con avena opción 1, 2 y 3

Avena:


Las espigas de la avena penden de finísimos tallos que se mueven graciosamente con la brisa más tenue.  Cuando el cereal está maduro y hallándose secas sus envolturas, puede percibirse un suave susurro.
(Del libro Los siete cereales, Udo Renzenbrink)

Además del almidón, el grano de avena presenta hidratos de carbono que son fácilmente asimilados por el intestino. Contiene más grasas que los demás cereales, estas grasas alivian al metabolismo del colesterol y protegen al corazón y la circulación sanguínea.
Las fibras de la avena tienen efectos benéficos sobre los órganos de la digestión, asimilan las sustancias tóxicas y regulan la acidez.
Tiene muchas vitaminas y nutrientes como: vitamina B1, proteína, calcio, hierro, magnesio, zinc, cobre, manganeso, tiamina y vitamina E en más altas concentraciones que otros cereales. 
 
Opción 1:
Pan de avena:
Este pan es esponjoso, liviano y suave...ideal para empezar a incorporar este cereal.


 
Ingredientes:
2 tazas de harina común de trigo                
1 taza de harina de avena
1 cda. de miel de caña y 1 de azúcar,   
(o 2 cdas. de azúcar)
25 grs. de levadura fresca
2 cdas. de aceite de girasol
3/4 cdita. de sal
Agua c/n
Avena arrollada para decorar


Preparación:
Colocar la levadura en agua tibia con azúcar y un poco de harina y dejar espumar. Aparte colocar en un bowl las harinas junto con la sal y una vez que la levadura ya espumó, agregarla con el aceite y el líquido. Amasar bien hasta formar un bollo. Una vez leudado, darle la forma que quieran al pan, humedecer con un poco de agua la superficie para que se le pegue la avena arrollada y dejarlo levar en un molde rociado con aceite.


Una vez que el pan levó colocar en el horno moderado (180 grados) hasta que esté dorado.


Opción 2:
Pan con salvado de avena:

El salvado de avena:

El grano de avena incluye el pericarpio o salvado y la semilla o grano propiamente dicho.
Fibra vegetal:
Se encuentra sobre todo en la capa que recubre al grano, se consume con el nombre de salvado de avena. Su principal componente es el betaglucano, un derivado soluble de la celulosa. Tiene un efecto laxante suave, pero sobre todo, disminuye el nivel de colesterol gracias a que absorbe y arrastra los ácidos biliares del intestino, materia prima para la fabricación del colesterol en el organismo.

Este pan es delicado, al masticar se sienten las pequeñísimas cascarillas del grano, ideal para el desayuno por su aporte de fibras.


Ingredientes:  
         
2 tazas de harina común de trigo
1 taza de salvado de avena
4 cdas. de aceite de maíz 
1 cdita. de sal 
1 cda. de azúcar 
25 grs. de levadura fresca  
Agua c/necesaria



Preparación:
La misma que para el primer pan...cambian los ingredientes y listo!!!


Una vez que el pan levó colocar en el horno moderado (180 grados) hasta que esté dorado.

Opción 3:
Pan integral con avena y almendras:
 Este es un pan para los que ya tienen alguna experiencia con lo integral ya que no tiene harina blanca. La almendra le queda muy bien.


Ingredientes:
3 tazas de harina integral         
2 tazas de harina de avena
1 cda. de azúcar 
25 grs. de levadura fresca
2 cdas. de aceite de maíz
50 grs. de almendras
Agua c/n  
1 cdta. de sal 


Preparación:
La misma que para el primer pan...cambian los ingredientes y listo!!!


Darle forma al pan, colocar algunas almendras para decorar y dejar levar.  Luego al horno moderado (180 grados) hasta que esté dorado.


¿Cuál les gustó más???

jueves, 22 de julio de 2010

Pan de calabaza

Primera vez que hago este pan aprovechando una bolsa de calabazas que mi papá trajo del mercado.


Ingredientes:
1 taza de germen de trigo
2 tazas de harina de trigo común
1 taza de harina integral
25 grs. de levadura fresca
1 taza de puré de calabaza
1/2 taza de aceite de maíz
1/2 taza de azúcar orgánica
1 cda. de sal
Semillas de calabaza y girasol para decorar

Preparación:


Haga una esponja con la levadura, un poco de agua tibia, harina y una cucharada de azúcar. Deje actuar en un lugar cálido. En un recipiente o en la mesada mezcle los ingredientes secos: las harinas, el azúcar y la sal. Cuando la levadura se haga esponja, agregue el puré de calabaza y añada agua junto con el aceite. Mezcle suavemente hasta lograr una masa homogénea. Deje reposar unos 15 minutos.
Amase en la mesada, parta en dos el bollo, arme los panes colocándoles las semillas por encima y disponga en dos moldes o budineras rociadas con aceite. 


Dejen leudar 20 minutos y cocinen a 200 grados durante 40 minutos. 


Dejen enfriar y corten...


Semillas de calabaza:


Son ricas en minerales, sobre todo el zinc. Contienen grandes cantidades de vitaminas A y D, por lo que son recomendables para nutrir la piel y embellecerla.
Ayudan a eliminar los parásitos intestinales.
Son altas en aporte proteico, por lo que no deben faltar en la dieta de los vegetarianos. 

Pesto de semillas de calabaza:
Se dejan en remojo una taza de semillas de calabaza peladas (pipas) durante 8 horas o toda una noche. Se pasan por la batidora junto con un poco de agua y aceite de girasol o de oliva, un poco de albahaca u orégano.  También se pueden usar las semillas de girasol.


Acá están las calabazas, también me trajo arvejas...los chicos tuvieron trabajo, pelaron media bolsa!!!!


 De premio comieron frutillas...



Acá están las arvejitas peladas y los chicos...cansados!!!


martes, 20 de julio de 2010

Focaccia per la mia famiglia...



Ingredientes:
1 kg. de harina 0000
1 cda. de azúcar
1 cdta. de sal fina
50 grs. de levadura fresca
4 cdas. de aceite de oliva
tomillo fresco
aceitunas verdes
cebolla de verdeo
1 cda. de sal gruesa

Preparación:
Disolver la levadura en un poco de agua tibia a la cual se le agrega la cucharada de azúcar y una cucharada de harina. Dejar que se esponje. Colocar la harina en un bol y agregar la sal fina, mezclar y hacer un hueco en el centro, agregar en él, el aceite de oliva y el fermento de levadura. Formar el bollo y amasar por 5 minutos. Tapar y dejar reposar en un lugar tibio y una vez que haya duplicado su volumen distribuir la masa en una placa aceitada haciendo presión con los dedos y colocar por encima las hierbas, la sal gruesa y las aceitunas, a gusto. Yo preparé una con tomillo y aceitunas y otra con cebolla de verdeo cortadita.

Otra vez tuve ayudante para cortar las aceitunas...pero se las comía!!!!

Una vez en la placa va al horno a 180 grados hasta que esté dorada.
 
Con esta focaccia armé un sandwich de berenjenas grilladas en rodajitas, salsa de tomate y una feta de queso.
 A la focaccia de cebolla de verdeo la rellené con queso y lechuga...







Origen de la Focaccia:
                                          Liguria
Se cuenta que los romanos hacían esta especie de “pan chato” y lo cocinaban sobre el lecho de hojas de laurel; actualmente en algunas regiones de Italia se lo cuece sobre un lecho de hojas de castaño.
Así como la “pizza” tiene su cuna en Nápoles, la focaccia pertenece a la Liguria, región rica en plantación de olivos, siendo este aceite el principal ingrediente de esta especialidad, el cual se enriquece con hierbas olorosas que crecen en esas tierras.


Las focaccias más altas y esponjosas son de la región de Puglia, cuya masa incluye entre los ingredientes cierta proporción de puré de papas. La de Recco se caracteriza por estar rellena de queso.
La “sfoglierata” es una focaccia sumamente aromática, se rellena la masa con hojas frescas de albahaca y se arrolla para luego cocinarla.